miércoles, 21 de octubre de 2009

Océano Pacífico


Desde niña te conocí.
contemplé tu inmensidad.
tú majestuosidad la palpe.

Tu ira la experimenté en la piel,
colmaste mis días de pasión
y como una tempestad,
penetraste en mi ser.

Calmaste mis angustias y penas,
inundaste de colores mis ilusiones,
tu oleaje, me sació de vida.

Profundidad, vértigo, desden,
es lo que irradias, con tu poder.
Llevame a ti, como una novia,
y llenas mis días de algarabía.



1 comentario:

Manel Aljama dijo...

Un bonito poema donde el Océano Pacífico es equiparable a un ser amado con el que en cada verso dialogas.

Llevame a ti, como una novia,
y llenas mis días de algarabía.